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La ranita verde y el pato 

 

En un charco muy grande y muy limpio vivían muchas ranas. 

  Una ranita verde quería ser la rana más grande del mundo.

  Un día se acercó un pato a beber agua.

  Las ranas dijeron:

 

-¡Mira, mira! Ésa es la rana más grande que hemos visto. 

 

La ranita verde contestó:

 

-Verán que yo puedo ser más grande que ella. 

 

Y allí mismo comenzó a comer y a beber y a comer y a beber. 

  La ranita verde se hinchó como una pelotita.

 

-¿Ya soy bastante grande? -preguntó.

 

-No, todavía es mayor la que viene a beber agua.

 

La ranita verde siguió comiendo y bebiendo. 

  Y se hinchó más y más, hasta que tuvo el tamaño de un balón de futbol y reventó. 

  Algunas ranitas verdes no saen que son muy bonitas estando pequeñitas, y por mucho que coman y beban nunca van a ser del tamaño de un pato. 

 

 

Anónimo

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